“Lo que está ocurriendo en la Franja de Gaza no es una guerra, es un genocidio”, declaró Lula da Silva ante la prensa en Adís Abeba, en Etiopía, donde participó como invitado en la cumbre anual de la Unión Africana.
El mandatario de izquierda de la principal potencia latinoamericana declaró que el conflicto “no es una guerra de soldados contra soldados”.
“Es una guerra entre un ejército muy preparado y mujeres y niños”, afirmó.
“Lo que está ocurriendo en la Franja de Gaza con el pueblo palestino no ha ocurrido en ningún otro momento de la historia. En realidad, ha ocurrido: cuando Hitler decidió matar a los judíos”, agregó.
En respuesta, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, calificó los comentarios de Lula de “vergonzosos y graves”, afirmando que constituyen una “trivialización del Holocausto”, y anunció que su gobierno convocó al embajador de Brasil en Israel.
“La comparación entre Israel y el Holocausto de los nazis y Hitler supone cruzar una línea roja”, señaló el mandatario en un comunicado, en el que insistió en que Israel está “luchando para defenderse”.
Según el ministro israelí de Relaciones Exteriores, Israel Katz, la reunión con el embajador brasileño tendrá lugar el lunes.
Las declaraciones de este domingo son las más contundentes emitidas hasta ahora sobre el conflicto por Lula, un importante representante de los países del sur global y que ocupa la presidencia rotatoria del G20.
Lula, de 78 años, afirmó en noviembre que el movimiento islamista palestino Hamás había cometido “un acto de terrorismo” en su ataque del 7 de octubre contra Israel, que dejó 1.160 muertos, en su mayoría civiles, según un balance establecido por AFP en base a datos oficiales israelíes.