Tristeza e impotencia generó la carta de renuncia de una médica del Instituto de Previsión Social, donde relata que prefiere dar un paso al costado de su gran sueño de ser traumatóloga infantil para poder cuidar su propia salud física y mental.
El pasado 12 de julio, la Dra. Belén Villalba remitió una nota de renuncia al Dr. Aníbal De Los Ríos, Jefe de Servicio de Ortopedia y Traumatología – IPS (ahora también renunciante), en la cual le relata las razones que la llevan a tomar esta decisión.
Salud física: la médica fue diagnosticada con tiroiditis de Hashimoto en enero del 2010 y se medica con levotiroxina diariamente. Cuenta que debe realizarse controles cada 3 meses y comer cada 3 horas. Con el cambio de ritmo de vida, falta de horario fijo de comida y sueño, sus necesidades de T4 aumentaron y su hipotiroidismo está descompensado.
“Me desvanecí ya en 5 ocasiones y pude prevenir otras 3 mediante cargas de Suero fisiológico. Pero no puedo continuar de esa forma. Solicité permiso para ir a consultar y me negaron, alegando que podía solicitar IC de Endocrinología por pacientes y luego mencionar que sería para mí. Fue necesario que tuviese un reposo para hacerme un análisis y consultar. Dentro de todo, me castigaron por presentar reposo”, comenta en su renuncia.
La profesional señala que quiso mantener su ritmo de comer cada 3 hs, pero constantemente le han apartado su comida o bebida, le han prohibido comer o incluso le han sacado fotos cuando acudía a retirar comida, aun siendo conscientes de su patología. La misma adjuntó imágenes que sustentan su versión.
Salud mental: refiere que así como su rendimiento físico ha disminuido, intelectualmente no puede seguir desempeñando de la forma en que le gustaría. Además subraya que pareciera ser que nunca es suficiente lo que haga.
“Constantemente he dado lo mejor de mí y según los fellows (e incluso usted) mencionan eso se nota. Pero mis R superiores no opinan de la misma manera. He tratado de sobrellevar el maltrato y el malestar con humor, tarareando algo mientras trabajo, pero también he sido regañada por eso. Me han hecho firmar notas de sanción sin entrevista previa, me han echado la culpa por errores ajenos, porque “debí supervisar a mis compañeros”, refiere la nota de renuncia.
“Es así, Dr., que prefiero dar un paso al costado (aunque mi sueño es ser traumatóloga infantil) para priorizar mi salud y garantizar mis derechos básicos”, dice finalmente.
Su nota de renuncia generó mucha indignación e impotencia en las redes sociales, y algunos de sus colegas se refirieron al respecto en sus cuentas personales.
FUENTE DIARIO HOY