More
    InicioNacionales“El Plantío Rafael Barrett”: Arte, tierra y memoria femenina en el corazón...

    “El Plantío Rafael Barrett”: Arte, tierra y memoria femenina en el corazón del poder

    Hace cinco años, en el Centro Cultural de la República – Cabildo, se inauguraba la exposición ¡Asunciones! Posiciones sobre mujer y sociedad, una reunión de más de cuarenta artistas en torno a la consideración social y cultural femenina y curada por quién esto escribe. Una de las piezas destacadas, emplazada extramuros y continuando en la sala principal del centro cultural era el Plantío Rafael Barrett creado por las artistas Mónica Millán y Adriana Bustos para la muestra Asunciones!

    A modo de formulación narrativa parcial sobre la muestra de arte Asunciones! Posiciones sobre mujer y sociedad, llevada a cabo entre noviembre de 2019 y el marzo pandémico de 2020, revisitamos, a la manera de un “viaje al pasado”, la posición y consideración de la mujer en el contexto local. Valiéndonos de capital simbólico producido por la antropología cultural y ejemplos de artefactos artísticos, relacionamos mediante la obra Plantío Rafael Barrett, los antiguos vínculos entre la mujer, la naturaleza y la cultura.

    Memoria pre y post pandémica

    A la llegada al Centro Cultural Cabildo, en la plaza Juan de Salazar, el visitante de la muestra Asunciones! Posiciones sobre mujer y sociedad, podía visualizar una gran plantación de maíz, mandioca, porotos, zapallos y maníes, desplegada en dos canteros de aproximadamente 70 metros cuadrados de superficie. Si recordamos que hacia esas fechas, las cuatro plazas principales del Eje Histórico-Cívico estaban ocupadas por cientos de habitantes damnificados o sin techo con cientos de casas precarias, el nuevo escenario paisajístico que brindó la obra Plantío Rafael Barrett, recordaba un huerto o una chacra campesina (visión que algunos referentes, entre intelectuales y un diario matutino consideraron de “anti-estética” extendiendo sus ideas conservadoras en las que campeaban el clasismo y el racismo en su máximo esplendor).

    La obra se completa en el interior del centro cultural con dibujos, escritos, fotografías y banderas que ilustran las diversas versiones de esta obra, instalada previamente en Asunción y Buenos Aires. La extensión extramuros del Plantío Rafael Barrett se integraba paisajísticamente a la fachada del antiguo Congreso paraguayo instalando el rostro campesino-rural en el corazón del poder político de la capital y que tanto molestó a sus detractores; su planteo interrogaba sobre cuestiones históricamente desatendidas por el Estado paraguayo.

    La visión del Plantío, una superficie vegetal autóctona y anárquica desafiante al modelo de jardín “europeo” imperante, sobre todo en estos espacios verdes era capaz de señalar la desigual distribución de tierras y el asedio a la cultura rural tradicional. El emplazamiento agrícola-botánico buscaba reflexionar en la soberanía alimentaria perdida por el difícil acceso a la tierra y a la cultura tradicional, y, sobre todo, iluminaba la ancestral relación entre mujer y agricultura.

    La acción de inauguración del Plantío Rafael Barret ocurrió con una acción de siembra, cuidados y riego, horas antes de la apertura de la muestra Asunciones!. La artista Mónica Millán y las miembras de Conamuri – una asociación que congrega a mujeres rurales e indígenas- pusieron sus cuerpos y tiempo para realizar la siembra de las semillas nativas.

    El concepto que se buscaba plantear a través de esta acción simbólica (el Plantío) era evidenciar la problemática de la tierra en nuestro país, que es un problema social, al tiempo de reflexionar en temas medio-ambientales, o a la agricultura campesina con rostro de mujer. Profundizar y fertilizar la consciencia de los visitantes a la muestra sobre asuntos como la propiedad de la tierra y la postergada reforma agraria; la economía social y solidaria; la educación alimenticia y el cuidado de las semillas nativas con rostro de mujer resonaban en esta propuesta.

    Tierra y palabra perdidas, o el odio a los árboles

    Bartomeu Meliá, gran conocedor y promotor de la realidad indígena y campesina, fallecido y velado justamente en el Centro Cultural Cabildo el día sábado 7 de diciembre de 2019, y dicho sea de paso, gran motivador y animador de esta acción artística para las creadoras Millán y Bustos, escribía: “la confiscación de la tierra ha ido siempre a la par con los intentos de confiscación de la palabra. Quien pierde la palabra perderá la tierra.” En esta línea de trabajo, las artistas tienen la necesidad de recuperar significados más amplios y profundos para asomarse, a través del arte, a estos dos conceptos ligados en la cosmovisón guaraní, tierra y palabra.

    “Pensar en la cultura guaraní, es pensar en la riqueza de su lengua en la que las palabras trabajo y tierra se despliegan en una admirable multiplicidad semántica, que nuestras lenguas occidentales desconocen y anularon desde tiempos coloniales. Pepy, Potiro y Jopoi, son palabras asociadas a una idea extendida del trabajo: de las manos, del ánimo o del cuerpo. El trabajo no se concibe si no es en común. Es un hacer recíproco, una mano que se extiende para dar y para recibir, es fiesta y celebración. Es la conciencia de sí mismo, que se construye sólo a través de la noción del otro y de la tierra. Es un modo de ser de un sistema económico que no es mera subsistencia sino también un sistema simbólico que en su dinámica mágica genera la abundancia. La tierra ha sido siempre motivo de disputas económicas y sociales en el Paraguay. Generadora tanto de riquezas como de pobreza, sus transformaciones territoriales son resultado de expropiaciones y ventas fraudulentas”.

    Dos meses después de inaugurada la muestra Asunciones!, pudo apreciarse el positivo proceso evolutivo de las plantas nativas, que buscaba culminar en la cosecha de los frutos, culminando en un Karu Guasu colectivo, a realizarse en marzo de 2020 y que la pandemia del Covid canceló. Sin embargo y previamente, la oposición de sectores adversos a esta obra, tanto políticos, intelectuales, del mismo centro cultural y mediático, resultaron, imprevistamente, en la destrucción del Plantío Rafael Barrett extramuros.

    Una cuadrilla municipal, a tempranísimas horas de un sábado de enero, procedió a aniquilar, o como nos explicaron, “a limpiar” la Plaza Juan de Salazar de esta incómoda obra de arte. Este fue el agridulce final de la obra realizada por las artistas y cuidada diariamente por niños y mujeres del populoso barrio de la Chacarita.

    Regándola con una manguera de ciento cincuenta metros, los jardineros voluntarios de la barriada contigua al Cabildo cuidaban el huerto y apaciguaron la canícula estival especialmente dura del microcentro asunceno: las mazorcas, las calabazas y las vainas anunciaban su promesa de vida interrumpida. Como diría Barrett, la belleza y sombra anuncian la violencia sistémica contra la flora en Paraguay, ejemplarmente narrada en su cuento “El odio a los árboles” y que el escritor Christian Kent, invitado a una activación de la muestra, declamara con sentida pasión.

    La muestra Asunciones! Posiciones sobre mujer y sociedad, fue un proyecto artístico que reunió a una treintena de artistas visuales, cineastas e intelectuales. Contó con el patrocinio del Instituto Cultural Paraguayo Alemán, del Goethe Institut, del Centro Cultural de la República Cabildo, además de haber obtenido el correspondiente permiso de actuación paisajística otorgado por la Dirección de Áreas Verdes de la Municipalidad de Asunción expedido el 5 de noviembre de 2019 y violado, dos meses más tarde, por la propia institución que lo había autorizado.

    Esta obra en particular fue una constatación del valioso capital simbólico producido por el pensamiento artístico que considera la antropología cultural y la historia política, fecundando en una obra poderosa, atemporal y vigente. La intervención paisajística hizo vislumbrar, ni bien sea durante ocho semanas, de una forma vital y preciosa, los vínculos sustanciales entre la mujer, la naturaleza y la agricultura, fructificando en esta inolvidable obra de las artistas Mónica Millán y Adriana Bustos.

    DEJA UNA RESPUESTA

    Por favor ingrese su comentario!
    Por favor ingrese su nombre aquí

    Must Read

    spot_img